La casa de Aravaca
En las afueras de Madrid, en Aravaca, una familia con dos hijos necesitaba cambiar por completo la distribución de su casa adosada con el fin de conseguir más amplitud.
Para ganar metros, decidimos que el espacio del garaje se daría a la casa y que allí pondríamos la cocina y el comedor. De este modo, la cocina, el comedor y el salón hoy se comunican en una planta baja que ahora es abierta y alargada.
La reforma continuó y se creó una planta superior. Pusimos los suelos y, sobre el antiguo garaje, construimos una suite con vestidor y baño que ocupa todo el largo de la casa. El resultado son tres estancias que funcionan casi como una única habitación y que se llenan de luz gracias a las claraboyas que colocamos en el techo inclinado.
La claridad que aportan el parqué de roble, el mobiliario y las paredes blancas hacen que destaque mucho más la luz natural en toda la vivienda. Este efecto se potencia con los textiles de fibras naturales y los tonos beige que se combinan con la madera clara de muebles como, por ejemplo, la mesa y la silla de anticuario que encontramos en el comedor.
Con la elección de los colores cálidos tan característicos de Coton et Bois, la decoración y la obra realizada, hemos logrado crear un hogar amplio, luminoso, atemporal y con un aspecto vivido de acuerdo a la personalidad y a las necesidades de nuestros clientes.